Las cifras del Fondo Monetario Internacional (FMI) no son nada halagadoras para el chavismo en su gestión económica en Venezuela. Este año 2021, según el organismo, Venezuela tendrá el peor récord del continente con una contracción de 10%, que se suma a la caída del 30% del producto interno bruto (PIB) en 2020 y un pronóstico de otra caída de 5% para 2022.
La continua caída del PIB se inició en 2013, bajo el Gobierno de Nicolás Maduro, aunque diversos analistas ubican los orígenes de la crisis en las postrimerías del Gobierno de Hugo Chávez, quien en 2012 estaba más ocupado en su salud y en conseguir la reelección.
Entre 2013 y 2020, el PIB se ha retraído en casi un 80%, siendo el año pasado el más crítico ya que la pandemia de Covid-19 potenció la crisis económica que estaba presente en Venezuela.
“Este informe del FMI recoge una serie de datos impensables hasta hace pocos años: Venezuela ya supera a Haití en el indicador estadístico de pobreza más utilizado por los expertos en el mundo“, precisa el periodista venezolano Omar Lugo, con larga experiencia en la cobertura económica internacional.
El ingreso per cápita de Haití en este 2021 será de 1.938 dólares, según el FMI, y el mismo indicador para Venezuela será de 1.541 dólares. (Cuba no aparece en este informe del FMI.)
“Se trata de ingreso per cápita, es decir qué parte del pastel de la riqueza (o de la pobreza) le corresponde a cada habitante de un país”, explica Lugo al ser consultado por DIARIO DE CUBA.
Es la primera vez que Haití no ocupa la posición de país más pobre del continente americano, en los índices de los organismos internacionales especializados.
“Esto es algo duro de asimilar cuando se habla de una expotencia petrolera de talla mundial, que hasta hace pocas décadas era el país más rico de América Latina y era un polo para atraer migrantes del resto del hemisferio y de Europa”, explica Lugo, quien es director de El Estímulo, un portal de noticias y análisis.
Aunque el aparato de propaganda del chavismo insiste en endosarle la quiebra económica del país a las sanciones de EEUU, en realidad la economía venezolana ya venía en picada desde 2013, mucho antes de que Washington emitiera la primera restricción al comercio petrolero de la estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PDVSA), que tuvo lugar en enero de 2019.
Lugo recuerda que el PIB per cápita es un promedio muy usado por los organismos internacionales, pero que en realidad esconde una realidad aún más cruda. “Hay en Venezuela millones de hogares que están por debajo del promedio, padeciendo inenarrables condiciones de pobreza extrema y hambre”, sostiene el periodista.
La hiperinflación venezolana está por registrarse entre las más prolongadas de la historia económica moderna. El FMI asegura que el año pasado el alza de precios fue de 2.355% y que este año prácticamente se duplicará para saltar a 5.500%.
“En síntesis, esto significa que las cosas en promedio serán 55 veces más caras este año con respecto a 2020”, resume Lugo. Este periodista, como diversos analistas, apunta a que mientras el país siga con un alza de precios tan pronunciada, será difícil revertir el crecimiento que está teniendo la pobreza en Venezuela.
En América Latina hay 18,5 millones de pobres y la mitad de ellos está en Venezuela. El país bajo el control del chavismo reporta 9,3 millones en los indicadores del FMI, mientras que Haití registra 3,7 millones.
El tamaño de la economía venezolana en su conjunto también se ha encogido. El PIB de este país, otrora potencia petrolera, será en este 2021, según el FMI, de apenas 42.530 millones de dólares, casi el doble que Haití. El PIB nacional de Bolivia será de 43.110 millones de dólares con lo cual estará por encima de Venezuela.
DDC
