Bávaro, Punta Cana-. En las últimas semanas, la comunidad de Bávaro ha sido testigo de una ola de envenenamientos masivos que ha cobrado la vida de una gran cantidad de perros y gatos, tanto callejeros como domésticos. Estos hechos atroces han generado indignación y consternación entre los residentes, quienes exigen justicia y acciones concretas por parte de las autoridades.
Una vez más, en el exclusivo Residencial Cocotal Golf & Country Club, varios propietarios e inquilinos dominicanos y también extranjeros, así como clientes de Airbnb, presenciaron con horror la masacre de mascotas. En la calle del Ejecutivo, numerosos perros callejeros han sido asesinados, al igual que otros que contaban con dueños responsables.
El domingo 20 de enero en la noche, en el Residencial Las Gaviotas, alguien colocó veneno de ratas, provocando la muerte de tres gatos y una perrita que se encontraba en el patio de su hogar. Varias mascotas fueron ingresadas en clínicas veterinarias en estado crítico, pero algunas lograron sobrevivir gracias a la rápida intervención médica.
La situación ha ido en escalada, con envenenamientos reportados en otras áreas como Friusa, Cana Town y distintos puntos de Punta Cana. Estos actos no solo reflejan una alarmante falta de humanidad, sino que también proyectan una imagen negativa de nuestra sociedad a nivel internacional.
¿Cómo es posible que en pleno 2025 se siga permitiendo tanta crueldad?
Resulta aún más indignante que, en algunos casos, la administración de ciertos residenciales tome medidas drásticas contra quienes no recogen los desechos de sus mascotas, pero no actúe ante la brutal matanza de estos animales. En Las Gaviotas, por ejemplo, la administración denuncia a los residentes que no cumplen con la normativa de higiene, pero no ha tomado acciones legales contra quienes han causado la muerte de las mascotas. Propietarios señalan que un residente italiano declaró abiertamente su intención de continuar con los envenenamientos, afirmando que «morirán más gatos».
El maltrato animal es un delito
La Ley 248-12 de Protección Animal y Tenencia Responsable en República Dominicana establece sanciones severas para quienes cometan actos de crueldad contra los animales. El envenenamiento es un crimen que debe ser castigado con el peso de la ley. Las organizaciones de protección animal, rescatistas y ciudadanos afectados han documentado estos casos con fotos, videos y diagnósticos veterinarios y están preparando las denuncias correspondientes ante las autoridades. Estos hechos no pueden quedar impunes.
Además del daño emocional que han sufrido muchas familias, este tipo de atrocidades afectan la reputación de Punta Cana como destino turístico de primer nivel. Los visitantes y residentes extranjeros que han sido testigos de estas matanzas se cuestionan si es seguro vivir en una comunidad donde se permite tal nivel de crueldad.
Llamado a la acción
Las protectoras de animales de la zona están desarrollando nuevas estrategias de prevención, pero necesitan el apoyo de la comunidad. Es fundamental que cada ciudadano cumpla con su deber de denunciar cualquier caso de maltrato animal. La ley nos obliga a actuar y no podemos permanecer indiferentes ante esta barbarie.
Las organizaciones protectoras y rescatistas locales hacen un llamado urgente a las autoridades y al gobierno para que se haga cumplir la Ley 248-12 y se detenga esta ola de asesinatos. Asimismo, invitan a la comunidad a unirse a la protesta pacífica que se llevará a cabo en Los Corales este sábado 15 de Febrero a las 4:30 p.m., con el fin de exigir justicia y la protección de los animales que no tienen voz para defenderse.
Es momento de actuar. La crueldad no puede ser tolerada en ninguna sociedad que aspire a ser justa y civilizada. La vida de los animales importa, y quienes han cometido estos crímenes deben responder ante la justicia. Exigen seguridad, respeto y humanidad para todos los seres vivos.
