Naopoleón Estévez Lavandier fue escogido anoche como nuevo presidente del Tribunal Constitucional (TC), en sustitución de Milton Ray Guevara, quien presidió la alta corte desde su fundación, en el 2011, hasta el momento. Estévez Lavandier, quien actualmente se desempeñaba como juez de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia, es licenciado en derecho, egresado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
Tiene una maestría en derecho constitucional y procesal constitucional; realizó un postgrado en derecho civil en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD); un postgrado en derecho procesal civil en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (Pucmm), donde es docente de la asignatura de derecho de garantías desde el año 2008.
Además, es autor de las obras “Ley No. 834 de 1978 Comentada y Anotada”, publicada en el 2004 y reeditada en el 2008, 2012 y 2017; “Índice de Jurisprudencia Civil (1998-2005); “La Apelación civil dominicana” (2015); “La Casación Civil dominicana” (2010); “Competencias Supremas: Jurisdicción Penal Privilegiada y Recurso de Revisión Penal” (2012); “Derecho de las seguridades y garantías del crédito” (2013).
Es socio de la firma de abogados Staff Legal, S.R.L., y fue socio fundador de la firma de abogados Stephen & Estévez, Abogados Consultores, S.R.L., se especializa en el área de Litigios Civiles, Comerciales y Penales.
Estévez Lavandier fue elegido juez de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) el 4 de abril de 2019.
En julio pasado fue asignado también como juez de instrucción especial en el caso de la diputada Rosa Amalia Pilarte López, a quien el Ministerio Público señala como parte de una alegada red de lavado de activos encabezada por su esposo Miguel Arturo López Florencio (Micky López), y uno de sus hijos.
Estévez Lavandier además ha demostrado ser un juez crítico. El año pasado manifestó su preocupación por la decadencia que observaba en el servicio del Poder Judicial. Igualmente expuso sus críticas a la complejización de procesos al ciudadano y sobre la supuesta burocracia que se había instalado en la Alta Corte.
Fuente: N Digital