Cada 28 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Rabia. Se eligió ese día en particular debido a que fue un 28 de septiembre del año 1895 cuando falleció Louis Pasteur, científico y médico responsable de la creación de la vacuna antirrábica. Una de las principales vacunas que ayudan a prevenir el contagio y propagación de tan horrible enfermedad.
Actualmente se estima, que en el 99% de los casos de rabia humana el principal responsable de la enfermedad ha sido un perro contagiado que la ha transmitido. Por esta razón, tanto la OMS como la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Alianza Mundial para el Control de la Rabia (GARC), se han propuesto como objetivo enmarcado en la Agenda 2030, erradicar completamente esta enfermedad en perros y prevenir el contagio y muertes en personas.
Día Mundial contra la Rabia. Lema 2024: Rompiendo barreras contra la eliminación de la rabia
El lema 2024 del Día Mundial contra la Rabia es: “Rompiendo barreras contra la eliminación de la rabia”. Los responsables de la campaña insisten en que para terminar definitivamente con la rabia trasmitida por perros, es necesario ir más allá de la norma y romper los límites. Y así se está trabajando en la región de Las Américas donde se ha logrado reducir en un 98% la trasmisión de la enfermedad, dato que supone la casi total erradicación de la rabia humana.
Estas cifras y logros se han conseguido a través de vacunación masiva de perros y gatos y también la vacunación de las personas que recibieron la profilaxis post exposición a la rabia después de recibir un mordisco o arañazo de animales de riesgo.
Rabia: qué es, síntomas y cómo se transmite
La rabia es una enfermedad transmitida por medio de un virus altamente infeccioso, que ataca a todos los mamíferos del mundo incluido por supuesto el hombre.
Aunque en la mayoría de los casos de rabia humana el detonante fue un perro doméstico, esta enfermedad se propaga por medio de la saliva de cualquier criatura contagiada al entrar en contacto con el torrente sanguíneo de la víctima.
Según datos estadísticos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos la rabia provoca más de 55 mil muertes anuales a nivel mundial, de las cuales el 95 por ciento ocurren en África y Asia.
El periodo de incubación de la enfermedad puede variar desde semanas a meses. Esta diferencia de márgenes de tiempo depende de dos factores puntuales: el primero es la localización de la lesión. Si está muy alejada de la cabeza o es muy pequeña, la infección se propagará en el cuerpo de forma mucho más lenta.
El segundo factor es la carga vírica. Si el virus en sangre no es tan fuerte, también puede atenuar el tiempo de incubación en un animal de mayores dimensiones.
Los síntomas para detectar la rabia, además de la mordedura de un animal, son fiebres muy altas acompañadas de dolor en la herida y durante esta fase la enfermedad es reversible. Además de inflamación del cerebro y de la medula espinal. Aquí la enfermedad avanzó demasiado y es probable que termine con la muerte del paciente.