Bávaro, Punta Cana.- Lo que debiera ser una calle de desahogo se ha convertido en un caos dado a la instalación de unos exagerados pilotillos que provocan tapones kilométricos en el desvío de Domingo Maíz, en Verón-Punta Cana.
Estos reductores de velocidad, colocados antes y después de la entrada del residencial Ciudad La Palma, en vez de colaborar con el descongestionamiento del tránsito en la zona turística, han desencadenado enormes taponamientos, sobre todo en las horas pico de la mañana y la tarde.
Conductores han enviado sus quejas a Bávaro Digital, preocupados además por el daño que estos pilotillos le ocasionan a las gomas de sus vehículos, dado al gran tamaño de los mismos.
Por el momento se desconoce quiénes instalaron estos reductores y si el Ayuntamiento de Verón-Punta Cana aprobó su colocación, para algunos innecesaria, ya que dicha vía tiene varios policías acostados que obligan a reducir la velocidad.