Un ciudadano australiano ha sido condenado a no poder salir de Israel durante 8.000 años tras confirmarse una deuda de 2,94 millones de euros en concepto de manutención para sus hijos tras su separación.
Se trata de Noam Huppert, un químico analítico de 44 años que trabaja para una empresa farmacéutica y que comenzó a incurrir en su deuda en 2013, según informa el portal australiano NewsAU.
Huppert ha sido condenado por un tribunal israelí a abonar 5.000 shékels (unos 1.400 euros) al mes por cada hijo hasta que cumplan los 18 años.
“Llevo atrapado en Israel desde 2013”, ha relatado el propio Huppert a la prensa australiana, al tiempo que ha asegurado que es uno de los muchos ciudadanos no israelíes “perseguidos por la Justicia israelí solo por haberse casado con una mujer israelí”.
El Departamento de Estado norteamericano alerta en sus avisos de viaje de que la ley israelí “prohíbe a ciertos individuos salir del país por deudas u otras cuestiones legales pendientes” y son habituales las quejas por la inconcreción de las leyes israelíes sobre divorcio que no investigan las finanzas de los cónyuges y permiten fijar manutenciones del cien por ciento e incluso más de los ingresos.
Fuente: Europa Press