Higüey, La Altagracia.- «Si no la sacan, se la comen viva», así respondió una fuente de entero crédito a Bávaro Digital tras consultar sobre las condiciones en la que está recluida la tía que torturó hasta causar la muerte de su sobrino de ocho años en Verón-Punta.
A Carmen Jiménez la tienen aislada en una celda de la cárcel La Colón de Higüey debido a que las demás reclusas «se la querían comer viva» al momento de ser encarcelada, según declaró la fuente fidedigna.
A la mujer le fue impuesto 18 meses de prisión preventiva como medida de coerción tras confesar haber golpeado y torturado al hijo de su hermano, quien le pagaba RD$ 6 mil para su cuidado.
Por el caso, el cual fue declarado complejo, también mantiene recluido a su supuesta pareja, identificado como Gonzalo Valencio Rojas, quien cumple la misma prisión preventiva en la cárcel CCR-14 de Anamuya.
Las autoridades mantienen en pie las investigaciones del horrendo caso que cumple mañana una semana de salir a la luz pública, luego de que el menor fuera llevado por los detenidos sin signos vitales al Hospital de Verón.
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