Una de las cosas más insólitas, es que el niño nació con una cabellera negra, similar a la que tiene su madre. Sin embargo, con el paso del tiempo y desde el sexto mes de vida, su pelo comenzó a formarse rubio intenso e indomable. Ante ello, el bebé recibió el sobrenombre de “Pelusa de durazno”.
Después de tres meses, el cuero cabelludo de Locklan tenía un color similar al de su hermano Shep, tres años mayor que él, pero su textura era diferente. De hecho, su fragilidad en el cabello, siendo fácil de romper y difícil de cepillar, destaca por sobre todas las cosas.
Esta particularidad llevó a que sus progenitores le crearan una cuenta de Instagram, donde muestran la belleza del pequeño junto a su particular look.
Sus fotos llevaron a que un usuario les enviara un mensaje sobre un posible caso de Síndrome del Cabello Impeinable, por lo tanto su madre decidió llevarlo al médico.
“La doctora dijo que solo había visto esto una vez en 19 años. No creíamos que fuera ese síndrome por lo raro que es, pero tomaron muestras y un patólogo las examinó con un microscopio especial”, dijeron desde el núcleo familiar de Locklan.
En tanto, la madre dijo: “Uno sigue su día a día pensando que su hijo puede tener el pelo rizado, que es algo que común en la familia. Pero escuchar que hay un síndrome raro asociado a tu hijo fue una locura”.
En lo que respecta al cuidado, la mujer detalló: “Apenas tengo que lavarlo, a no ser que esté jugando literalmente en la tierra, porque no se engrasa. Es increíblemente suave, y la gente quiere tocarlo todo el tiempo. Apenas lo peino, porque es muy frágil. Trato de ser muy delicada con él y no lo toco a no ser que sea necesario”.
Fuente: Ámbito