Anio Castillo, de 58 años de edad, decidió acabar con su vida este lunes 26 de abril al momento en el que viajaba junto a un hermano desde Sabana Grande de Boyá para ser tratado por depresión por parte de un psiquiatra.
El hombre abrió la puerta del vehículo que conducía su hermano y se lanzó hacia la parte seca debajo del puente Francisco del Rosario Sánchez (de la 17) muriendo al instante.
Su hermano cuenta que Castillo entró en depresión luego de que el actual gobierno asumiera el poder y éste decía que lo iban a cancelar, ya vio que a muchos de sus compañeros los habían cancelado, por lo que empezó a enfermarse.
Castillo era empleado del Ministerio de Salud Pública en Sabana Grande de Boyá, y una de sus responsabilidades era llevar durante todo el día las prueba del COVID-19 que se le hace a los pobladores desde Sabana Grande de Boyá a Monte Plata en una motocicleta.
El hoy occiso tenía tres hijos, una de 12 años residente en el país, y los demás en Estados Unidos.