República Dominicana ha experimentado un significativo incremento en la popularidad de los alojamientos de renta corta entre los turistas, lo que ha impulsado un aumento en la oferta de infraestructuras inmobiliarias destinadas a este propósito.
Para agosto del presente año, el país caribeño contaba con un total de 106,990 habitaciones disponibles a través de plataformas digitales como Airbnb, Booking y otros servicios similares. Este número representa un asombroso aumento del 212 % en comparación con el mismo período del año anterior, según datos proporcionados por el Ministerio de Turismo.
Brenda Morales, directora del Consejo de Fomento Turístico (Confotur), comentó que esta tendencia de crecimiento es notable y subrayó la relevancia de este sector en el turismo dominicano. Durante los primeros nueve meses de este año, 355,177 extranjeros no residentes se hospedaron en alojamientos de renta corta a través de estas plataformas, lo que representa un 6 % del total de ocupación durante ese período.
Estas propiedades generan ingresos promedio de 135.7 dólares por día, según estadísticas del Ministerio de Turismo. En términos de costos, la zona de La Romana destaca por ofrecer habitaciones a un precio promedio de 640 dólares diarios, con una estadía promedio de 3.6 días. Le sigue la zona de Verón-Punta Cana, con una tarifa diaria de 252 dólares y una estadía promedio de 3.8 días.
El auge de los alojamientos no tradicionales se ha intensificado después de la pandemia del COVID-19. De acuerdo con Roberto Despradel, consultor de la firma Despradel y Asociados (DASA), en el año 2022, el 26.7 % de los turistas que visitaron República Dominicana prefirieron alojamientos no tradicionales, un notable aumento en comparación con el 6 % registrado en años anteriores.
La regulación de estas plataformas y su impacto en el turismo inmobiliario fue un tema central en el Primer Foro de Turismo Inmobiliario, organizado por la Asociación Dominicana de Empresas Inmobiliarias Turísticas (Adeti). Jorge Subero Medina, presidente de Adeti, subrayó la importancia de que el sector público supervise estas propiedades para garantizar la calidad y seguridad para los turistas.
David Llibre, presidente de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores), consideró que la regulación beneficiaría el financiamiento de proyectos inmobiliarios en el sector. Además, permitiría a los hoteles competir en igualdad de condiciones en el ámbito turístico y mejorar la comercialización de la oferta inmobiliaria turística.
El Ministerio de Turismo ha estado trabajando en la regulación de estas plataformas digitales, aunque aún no se han anunciado avances concretos. El acuerdo se centraría en el registro de propiedades y las condiciones fiscales que deben cumplir para estar debidamente reguladas ante el Estado. Brenda Morales aseguró que el Ministerio continúa refinando el acuerdo, aunque no proporcionó una fecha precisa para su implementación.