RD.- Nombres como David, Georges, Federico, y otros más antiguos como Inés y San Zenón, quedaron grabados en la memoria colectiva por mostrar la fuerza implacable de la naturaleza que en varias ocasiones paralizó al país.
De acuerdo con estadísticas del Ministerio de Agricultura, desde 1851 el territorio dominicano ha sido golpeado por cerca de 70 huracanes, de los cuales 24 se catalogan como de gran intensidad debido a su alto poder destructivo y las pérdidas ocasionadas.
Para José Hernández y Yoni Hasbún, estas cifras no son simples números. Ambos eran niños cuando vivieron el devastador paso del huracán David, el 31 de agosto de 1979, considerado uno de los fenómenos naturales más catastróficos del país.
Aunque José residía en Los Mameyes y Yoni en Haina, hoy comparten en redes sociales sus recuerdos de aquel día aterrador. José describe que “tras el huracán, zonas como Los Mameyes y La Isabelita parecían bombardeadas; casi no quedó una casa en pie”, mientras Yoni revive con espanto cómo “una casa fue destruida por completo y las láminas de zinc salían volando”.





