El Gran Santo Domingo y las provincias del Sur ya sienten los efectos de la tormenta tropical Melissa, que ha dejado lluvias intensas, ráfagas de viento y fuerte oleaje en las últimas horas. Según los pronósticos del Centro Nacional de Huracanes (NHC) y del INDOMET, el sistema está realizando un giro gradual hacia el noroeste y el norte, lo que alejará su trayectoria directa del territorio dominicano en los próximos días.
A pesar de este desplazamiento, las bandas nubosas del fenómeno continuarán generando abundantes lluvias en gran parte del país, con posibles inundaciones urbanas y rurales. Mientras tanto, Haití mantiene una vigilancia de huracán ante su cercanía con el sistema.
En sectores vulnerables como Los Guandules y Gualey, muchas familias se preparan para posibles crecidas de ríos, subiendo sus pertenencias y almacenando alimentos esenciales. Otros se trasladan temporalmente a viviendas más seguras, siguiendo las recomendaciones del Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Aunque el giro de Melissa al norte trae cierto alivio para el sur del país, las autoridades insisten en mantener la precaución ante el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra.
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