El incendio ocurrido en el complejo Wang Fuk Court dejó 128 fallecidos y alrededor de 200 personas desaparecidas, según confirmaron las autoridades de Hong Kong.
El secretario de Seguridad, Chris Tang, explicó que la rápida propagación del fuego se debió al uso de poliestireno inflamable en las ventanas, lo que hizo estallar los cristales y permitió que las llamas se extendieran por todo el edificio, que además estaba cubierto por andamios de bambú por trabajos de remodelación.
Las alarmas contra incendios no funcionaron, confirmó el director de Bomberos, Andy Yeung, quien adelantó que habrá consecuencias penales. Varios sobrevivientes aseguran que nunca escucharon las alarmas.
El incendio comenzó en la torre 8 del complejo, donde viven más de 4,600 personas. Hasta el momento, cinco individuos vinculados a la constructora y al estudio de arquitectura encargado de la rehabilitación fueron detenidos.
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