El expresidente estadounidense Donald Trump ha intensificado su postura ante la guerra en Ucrania, emitiendo un nuevo y drástico ultimátum al presidente ruso, Vladimir Putin. Durante un encuentro con el primer ministro británico, Keir Starmer, en su club de golf al sur de Glasgow, Trump redujo el plazo para el cese de hostilidades a «10 o 12 días», advirtiendo de la posibilidad de implementar sanciones adicionales.
Trump, quien se mostró «muy decepcionado» por los continuos ataques rusos a civiles ucranianos, expresó que «no hay razón para esperar» y que «ya no está tan interesado en hablar» con Putin, a pesar de sus expectativas iniciales de un rápido fin del conflicto. El expresidente señaló que está evaluando la imposición de sanciones «secundarias», dirigidas a naciones que adquieran productos rusos, como hidrocarburos, para impactar directamente en los ingresos de Rusia.
En respuesta, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, elogió en la plataforma X (anteriormente Twitter) la «posición clara y una firme determinación» de Trump, considerándola oportuna para lograr una «paz verdadera».
En la misma reunión bilateral con Starmer, Trump abordó la crítica situación humanitaria en la Franja de Gaza. El exmandatario, que hasta ahora había mantenido un perfil bajo sobre este tema, reconoció señales de una «verdadera hambre» en el territorio palestino, aludiendo a imágenes de niños afectados.
Trump prometió una mayor asistencia, incluyendo la apertura de «centros de distribución de alimentos» para llevar «buena comida fuerte» y «salvar a mucha gente». Afirmó que un alto el fuego entre Israel y Hamás es «posible».
Por su parte, el primer ministro Starmer describió la situación en Gaza como una «catástrofe absoluta», en medio de presiones internas para que el Reino Unido reconozca un estado palestino.






Leave a comment