La búsqueda de los cinco mineros desaparecidos en el yacimiento de El Teniente, la mina de cobre más grande del mundo, ha llegado a su fin de manera trágica. Los equipos de rescate han encontrado sin vida los cuerpos de los trabajadores, confirmando el peor de los escenarios tras un derrumbe que paralizó la mina la semana pasada. Con este lamentable hallazgo, el número de víctimas mortales por la tragedia asciende a seis.
El operativo de rescate, que movilizó a más de un centenar de personas, se mantuvo activo sin interrupciones durante 48 horas en un intento desesperado por encontrar una zona de refugio en la que los mineros pudieran haber sobrevivido. La esperanza se mantuvo viva hasta el día de ayer, cuando se halló el primer cuerpo sin vida. Las horas siguientes confirmaron la fatalidad al ir recuperando los restos mortales de los otros cuatro mineros, sepultados en diferentes puntos de la galería.
La tragedia se desencadenó el jueves 31 de julio de 2025, a las 17:34, cuando un sismo de magnitud 4.3 sacudió la región central de Chile. Este movimiento telúrico provocó un derrumbe en el proyecto Andesita de la mina, dejando a un trabajador fallecido de forma instantánea y a otros nueve heridos. El colapso dejó atrapados a los cinco mineros que ahora han sido encontrados.
La empresa estatal Codelco, operadora de la mina, detuvo de inmediato todas las operaciones, mientras la Fiscalía de la región de O’Higgins, dirigida por el fiscal Aquiles Cubillos, inició una investigación para esclarecer si el sismo fue de origen natural o inducido por la actividad minera.
El fatal desenlace de la búsqueda conmociona a la comunidad minera y a todo el país, que ahora lamenta la pérdida de seis trabajadores en uno de los accidentes más graves en la historia reciente de El Teniente.
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