Estados Unidos. – Un juez de Los Ángeles rechazó este lunes la petición de un nuevo juicio presentada por Erik y Lyle Menéndez, quienes cumplen cadena perpetua por el asesinato de sus padres, José y Mary Louise “Kitty” Menéndez, en 1989 en Beverly Hills.
La solicitud fue presentada en 2023 por la defensa, que argumentaba que nuevas pruebas respaldaban la versión de los acusados: que el crimen se cometió tras años de abuso sexual y psicológico por parte de su padre. Entre estas pruebas se incluían una carta escrita por Erik a su primo en 1988 y declaraciones de Roy Rosselló, exintegrante de la banda Menudo, quien también acusó a José Menéndez de abuso sexual durante su adolescencia.
Sin embargo, el juez William Ryan, de la Corte Superior de Los Ángeles, determinó que estas evidencias no habrían sido suficientes para cambiar el veredicto del segundo juicio de 1995, que concluyó con la condena de ambos por asesinato en primer grado y conspiración. “La evidencia de planificación y premeditación sigue siendo contundente”, señaló Ryan.
• Intentos fallidos de libertad condicional
El mes pasado, los hermanos también vieron rechazadas sus solicitudes de libertad condicional, a pesar de que sus resentencias de entre 50 años y cadena perpetua los hacían técnicamente elegibles por su edad al momento del crimen (ambos menores de 26 años).
Las juntas estatales denegaron su liberación, indicando que podrían volver a solicitarla dentro de tres años.
• Último recurso: indulto gubernamental
Con la negativa del juez, la única opción legal que les queda es solicitar un indulto al gobernador de California, Gavin Newsom, aunque expertos legales consideran que la probabilidad de éxito es muy baja.
A lo largo de más de tres décadas, los múltiples intentos de la defensa por presentar la narrativa del abuso como factor desencadenante del crimen no han logrado revertir la condena, consolidando este caso como uno de los más mediáticos y controvertidos en la historia judicial de Estados Unidos.
