La basura se ha convertido en una verdadera pesadilla para los residentes de Pueblo Bávaro, donde las casetas destinadas a contener los desechos están completamente desbordadas. Moscas, gusanos y un hedor insoportable se han adueñado de las calles, mientras la administración brilla por su ausencia.
La situación ha alcanzado niveles críticos. Los montones de basura no solo obstruyen las aceras, sino que también representan un riesgo latente para la salud pública. Según denuncias de los propios moradores, los camiones recolectores llevan días –incluso semanas– sin pasar, y no hay ningún aviso oficial sobre cuándo se restablecerá el servicio.
“Esto es inhumano. No podemos ni abrir las ventanas por el olor. Hay moscas por todos lados, y los gusanos ya están saliendo a la calle. Tenemos niños, tenemos ancianos… y nadie da la cara”, declaró indignada una residente del complejo.
La comunidad exige una respuesta inmediata de las autoridades municipales y de la administración de Pueblo Bávaro, antes de que esta crisis sanitaria se convierta en una catástrofe mayor.
