«…Todo aquello que es nacido de Dios, vence al mundo y está es la victoria que vence al mundo, nuestra fe» 1 Juan 5:4
Mis amados, Dios nos enseña a través de sus escrituras, que si colocamos nuestra fe en hábitos saludables. Podremos vencer los obstáculos, que intenten corromper el buen camino deseable.
Acaso ¿Existe, algo bueno que ofrezca el mundo?
Definitivamente, no.

Pues, el mundo ofrece: codicia, engaño, adulterio, borracheras, chismes, enojos, vanidad, envidias, egoísmos, deseos de poder, política, corrupción, rencor, manipulaciones, adulaciones, idolatría, robos, asesinatos, sobornos, mentiras, exageraciones, maltratos y ferviente orgullo.
Por tal razón, hay mucho daño que se produce en el mundo, y en su mayoría son incitados por la sociedad sin razón. Dado que, cierran sus oídos y engrosan su corazón para lamentar la perdición.
Por eso, Dios nos enseña que debemos aprender a escuchar bien su voz. Y su promesa será cumplida en nosotros como símbolo de amor.
Así que, existe un testimonio mayor que nos conduce a creer en Dios. Y si es, a través del amor, misericordia y perdón. Ya que, eso es un buen nutriente para el corazón.