Bávaro, Punta Cana.- Yudelkis Hernández Santos, alias Gleny, salió a Bávaro el pasado 19 de febrero de su natal municipio Cabrera, en la provincia de María Trinidad Sánchez, a llevar a su pareja sentimental al Aeropuerto de Punta Cana sin saber que ese sería el fin de su vida. Señalan al extranjero de darle muerte de una forma dantesca: carbonizada con RD$ 200 de gasolina.
La mujer fue reportada como desaparecida por sus familiares dos días después de su salida hacia la zona turística, desconociendo que el nombrado Andrew Adepoju había calculado fríamente el crimen el mismo día que partió hacia los Estados Unidos.
La desaparición
La fémina de 41 años viajó más de 300 kilómetros en su jeepeta Hyundai Santa Fe color blanco, placa G684469 para llevar al hombre hacia el aeropuerto pero, según versión de los familiares, sostuvieron una acalorada discusión y desde allí no supieron más de ella. Mientras tanto, Adepoju, de origen nigeriano, partió hacia suelo norteamericano, despistando a los familiares al decirles que la mujer se había ido molesta en un motoconcho con rumbo desconocido.

El hallazgo
Los familiares preocupados por su desaparición, empezaron a buscarla y dieron seguimiento al GPS de su vehículo, ubicándolo abandonado, el 21 de febrero, en la terminal B del Aeropuerto Internacional de Punta Cana. Sin embargo, el hermano de la víctima no se quedó de brazos cruzados y continuó la búsqueda a través del historial del GPS, visitando los últimos lugares donde había hecho parada el vehículo el día de la desaparición hasta encontrarse con la horrorosa escena en el Boulevard Turístico del Este. Allí, en un solar baldío lleno de basura, próximo a la estación de Bomberos, estaban carbonizados entre los escombros los restos de la osamenta de Gleny: su cabeza, hombros, su brazo izquierdo y los huesos de su columna.
El señalamiento de su pareja como autor de la muerte
Tras esto, autoridades de la Dirección de Investigaciones Criminales (DICRIM) de Bávaro dieron pie a la investigación y mediante coordenadas del GPS vieron los lugares donde hizo paradas el vehículo, incluyendo en dos ocasiones el sitio donde fue encontrado el cadáver carbonizado. Pero previamente, incluso en videos obtenidos, se muestra cuando Andrew Adepoju, exactamente a las 10:26 de la noche del 19 de febrero, llegó a la bomba Texaco, ubicada en la Av. Estados Unidos, esquina Av. España, a bordo de la jeepeta de Gleny; se desmontó, sacó un galón plástico y compró 200 pesos de gasolina regular, con lo que se demuestra que él es el autor material del hecho, motivado a asuntos pasionales entre ellos.
La osamenta fue enviada al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en Santo Domingo para proceder con las pruebas toxicológicas y de ADN que den pie a que el hombre sea detenido por la Interpol. Sin embargo, en la República Dominicana ya se activó su búsqueda.